
Guzmán y Raverta de Anses se juntaron para examinar una indemnización para los jubilados y buscan aparatos alternativos luego de que el Fondo Monetario Internacional cuestionara los «aumentos discrecionales».
Por la suba de los costos, la titular de Anses, Fernanda Raverta y el ministro de Economía Martín Guzmán trabajan en un nuevo bono para jubilados para indemnizar la pérdida del primer trimestre, en especial por el incremento de los alimentos.
La indemnización que se examina para abril se elabora con un nuevo formato debido a que tras el acuerdo con el FMI el staff detalló que «se tienen que eludir las subas discrecionales de las jubilaciones y pensiones debido a que tienen la posibilidad de socavar las metas fiscales y la sostenibilidad del sistema», relacionadas justamente a los bonos especiales. ¿Necesitas ayuda tramitando una pensión por invalidez?Con el asesoramiento a jubilados de Andrea Falcone decidís mejor.
En aquel marco, el esquema en el cual trabajaron anoche Guzmán y Raverta contempla un sistema de vales, según indicaron fuentes oficiales, para indemnizar la pérdida de las jubilaciones a lo largo del primer trimestre, donde la inflación se acerca al 14%. El costo que se baraja está en los $ 8000, en línea con el bono de fin de año.

Tras el incremento de los haberes previsionales y las asignaciones parientes del 12,28% que marcó la fórmula de movilidad para marzo, la jubilación mínima pasó a ser de $ 32.630 en la Argentina.
En la víspera de los datos de pobreza del INDEC para el segundo semestre de 2021, la exploración del Fondo Monetario Internacional apunta que el 14% de los adultos más grandes de la nación son pobres, en lo que en la situación de los chicos, dicha tasa llega al 54%.
«Beneficios Generosos»
El consenso con el Fondo Monetario no prevé una reforma previsional aunque sí cambios a los regímenes especiales. No obstante, en la perspectiva del Fondo Monetario Internacional, se necesita mejorar la sostenibilidad del sistema y el informe que se elevó al directorio del organismo destaca la vasta cobertura y los «generosos beneficios».
«El alto gasto resulta tanto de su amplia cobertura como de sus generosos niveles de beneficios. La proporción de jubilados respecto de la población mayor de 65 años es del 140%, en comparación con el 109% del promedio de la OCDE, gracias a edades de jubilación relativamente tempranas, así como a las moratorias de las pensiones que incorporaron al sistema contributivo a los individuos con aportes insuficientes (ahora el 30% de las pensiones).
El Fondo subraya que las jubilaciones representan el 40% de todo el gasto primario federal y el 12% del gasto provincial. Con un 10% del Producto Interno Bruto en 2021, el gasto en pensiones «está bastante por arriba del promedio de la OCDE y más del doble del promedio de otros pares de América latina y mercados emergentes».